Colombia, al igual que otros países de América Latina, se encuentra ante el desafío de enfrentar el fenómeno climático conocido como «El Niño». Este evento, caracterizado por el calentamiento anómalo de las aguas del Océano Pacífico, puede tener importantes consecuencias para el país, como sequías prolongadas, reducción de las precipitaciones y aumento de las temperaturas.
En relación con ello, dentro del marco del XXV Congreso de la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Públicos y Comunicaciones (Andesco) en desarrollo en Cartagena, el Gobierno nacional ha reafirmado su preparación y ejecución de las medidas necesarias para enfrentar el fenómeno del niño.
Según el viceministro de Energía encargado, Cristian Díaz, quien participó en el XXV Congreso de la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Públicos y Comunicaciones (Andesco) en Cartagena, «No hay riesgo de desabastecimiento de energía. El sistema está preparado para enfrentar un escenario de contingencia». Esta afirmación respalda las acciones del Gobierno colombiano en preparación para el fenómeno del niño.
Además, se ha tomado en cuenta que el Centro de Predicción Climática de la Agencia Meteorológica de Estados Unidos (NOAA) pronostica que hay un 90 % de probabilidades de que el fenómeno de El Niño se materialice totalmente a partir de agosto.
Ante esta perspectiva, desde agosto de 2022, el Gobierno ha activado reuniones pertinentes en el marco de la Comisión Asesora de Coordinación y Seguimiento a la Situación Energética (CACSSE), para anticiparse y coordinar las acciones necesarias.
Desde varios ministerios se tomarán medidas para hacer frente a este fenómeno.
El Comité Nacional de Adaptación al Cambio Climático (CNA) emitió una serie de recomendaciones dirigidas a las instituciones nacionales para hacer frente al fenómeno de El Niño:
Ministerio de Vivienda:
Se asumirá la responsabilidad de implementar acciones encaminadas a garantizar el suministro de agua, especialmente en zonas rurales y comunidades indígenas. Se prestará especial atención a las regiones de la Orinoquía y la Amazonía. Se llevarán a cabo medidas como el tratamiento de aguas y la rehabilitación de pozos en La Guajira.
Ministerio de Salud:
Se encargará de realizar un seguimiento exhaustivo en los municipios que presenten un índice de riesgo medio o alto en cuanto a la calidad del agua para consumo humano. Además, se fortalecerá la red hospitalaria para hacer frente a posibles enfermedades relacionadas con los golpes de calor.
El Ministerio de Minas y Energía:
Tendrá la tarea de llevar a cabo reuniones mensuales de la Comisión Asesora de Coordinación y Seguimiento a la Situación Energética del País. Estas reuniones servirán para monitorear aspectos como el mantenimiento, la disponibilidad y el suministro de combustibles.
CNA (Consejo Nacional de Acreditación)
Hizo un llamado a las autoridades ambientales competentes para promover el reúso del agua, intensificar las recomendaciones a los visitantes de áreas protegidas para prevenir incendios forestales, y fomentar el almacenamiento de agua de lluvia siguiendo las pautas establecidas por el sector salud, con el objetivo de evitar enfermedades como el dengue.
Estas medidas y acciones propuestas por el CNA demuestran la importancia de una respuesta coordinada y enfocada en mitigar los efectos del fenómeno de El Niño, salvaguardando así la salud y el bienestar de la población y el entorno natural del país.