En un fin de semana marcado por la escalada de violencia, Barranquilla y su área metropolitana enfrentan una cruda realidad con once asesinatos que han dejado a la comunidad atónita. La cifra, superior a la registrada en el fin de semana anterior, plantea un desafío serio para las autoridades locales y refleja una alarmante tendencia al alza en la criminalidad.
Detalles de los Hechos: Un Fin de Semana Teñido de Sangre
La oleada de homicidios comenzó el pasado viernes en el barrio Miramar de Puerto Colombia, con el asesinato de Roberto Aristóteles Cure, víctima de sicarios en moto. El mismo día, en Soledad, Luis Alfredo García Lascano cayó abatido a balazos en el barrio Bello Horizonte, mientras que en Barranquilla, el barrio Abajo fue escenario de un ataque sicarial que dejó un hombre muerto y dos heridos.
El viernes culminó con la trágica muerte de Gever Barrosa en el barrio Las Américas, sumando otro capítulo a la crónica de violencia. El sábado, ‘Pastorcito mentiroso’, alias de Luis Carlos Álvarez Rivera, fue asesinado en el barrio Villa Flor, y en el barrio Barlovento, un violento ataque dejó dos muertos y tres heridos.
Rastro de Violencia: Bandas y Conflictos Personales en el Foco
La investigación señala la posible implicación de la banda ‘Los Pepes’ en varios de estos crímenes, especialmente en el caso de Adolfo Arturo Fonseca Colón, a quien atacaron con brutalidad, dejando un mensaje en redes sociales. El fin de semana también vio la muerte del mecánico Skewin Tomás Palmera Luna y un enfrentamiento en Rebolo que cobró dos vidas.
El domingo continuaron los hechos violentos con la muerte de Edver Jesús Arias Bravo durante una riña en el barrio Cevillar. La noche no trajo alivio, ya que sicarios acabaron con la vida de Luis Carlos Feifo Garzón y su hijo de cinco años en Santo Domingo, con indicios de que el blanco inicial era el padre.
En Soledad, el barrio La Floresta fue escenario de otro crimen, donde Yuleisi Briyith Jiménez Vásquez, señalada como novia de un presunto sicario de ‘Los Pepes’, perdió la vida en un ataque a su vivienda.
Reacciones y Desafíos para las Autoridades
La comunidad se encuentra consternada y exige respuestas a las autoridades locales. La Policía ha iniciado investigaciones para esclarecer los motivos detrás de esta ola de violencia, mientras que las fuerzas de seguridad redoblan esfuerzos para contener la situación.
En medio de este difícil panorama, la ciudadanía espera medidas concretas que devuelvan la seguridad a las calles y pongan fin a esta escalada de violencia que ha dejado once familias en luto y a la comunidad en estado de alerta.